German Doin y Verónica Guzzo han realizado un enorme trabajo para documentar la existencia de alternativas educativas en el mundo hispanohablante. Han visitado una amplia diversidad de escuelas alternativas y han entrevistado a un gran número de educadores alternativos, en casi todos los países de habla hispana. Desde agosto del año pasado, el resultado puede verse en la internet, en forma de una película documental.
Encontré que este documental es una excelente herramienta para «despertar» y animar a padres y a alumnos (y aun a profesores) del sistema escolar, quienes se ven por primera vez confrontados con la idea de que «educación» o aun «escuela» podría ser algo muy diferente de lo que ellos conocen de parte del sistema escolar dominante. Sobre todo aquí en las alturas del Perú, donde no existe prácticamente ninguna escuela alternativa, y ni hablar de padres que se atreven a educar a sus hijos ellos mismos. En esta película pueden ver que efectivamente existen escuelas donde los niños son tomados en serio, donde son libres para aprender según sus propios intereses y su propia manera de desarrollarse, donde aprenden jugando, «haciendo» y descubriendo, donde no son separados por grados ni clasificados (y desmoralizados) a base de exámenes y calificaciones. Estas ideas y posibilidades son totalmente nuevas para prácticamente todas las personas que conozco en mi entorno inmediato. Por tanto estoy muy agradecido por «La educación prohibida», porque puedo mostrar a estas personas que nosotros no somos los únicos «locos» que piensan y educan así.
También resalta muy bien los problemas del sistema escolar actual, y los daños que este sistema causa a los alumnos y profesores. Uno pensaría que estas cosas son de conocimiento general, puesto que casi toda persona ha asistido alguna vez a una escuela tradicional, y los que son padres de niños escolares, pueden observar diariamente en sus hijos (si es que toman el tiempo y el interés para observarlos) como la escuela daña su personalidad, su autoestima, su creatividad, su inteligencia, su motivación para aprender, su alegría de vivir … Pero a pesar de que estas cosas son tan obvias, la gran mayoría de la gente prefiere no verlas, y mantienen su fe ciega en el sistema dominante. «La educación prohibida» puede ayudar a algunas de estas personas a abrir los ojos.
La película es tan repleta de información y además tan larga, que uno necesita mirarla más de una vez para captar todo. Pero de hecho es imposible para una persona que nunca se ha ocupado con el tema de una educación alternativa, entenderlo sin que se le dé una gran cantidad de información y de ejemplos concretos y prácticos. (Lo que nosotros hacemos normalmente, es invitar a los padres a que pasen una mañana en nuestro programa vacacional y vean de primera mano como trabajamos con los niños – pero hasta ahora, una sola madre ha hecho uso de esta oportunidad. Así que los demás ahora pueden por lo menos ver la película.) Visto de esta manera, los autores han hecho un trabajo excelente al condensar tantos aspectos diferentes, tantas ilustraciones y tantos comentarios en una película de «solamente» dos horas y veinte minutos.
Por el otro lado coincido con el comentario de Mónica en el blog «Familia libre»:
«La Educación Prohibida enfoca el problema de la educación, todavía como un problema que se lograría desde la transformación del sistema educativo. Parece que todavía deberíamos esperar a que algo nos llegue “desde arriba”.
Me faltaron los de abajo: Los niños, los padres, las familias, los vecinos. Me faltó la alternativa de educación en casa, y de desescolarización.
Faltaron los proyectos simples de los niños en ambientes caseros y no ultra preparados; faltó ver a una niña bien dormida todas sus horas, desayunando con calma y poniéndose a jugar con cualquier cosa sencilla. Las casas de familia no impresionan como los colegios alternativos, y los discursos de los padres no son tan reproducibles como los de los expertos.
Las escuelas alternativas son lindas. Yo las conozco. Pero el momento en que te dan la posibiliad de dejar a tus niños para que los eduquen (o los dejen ser libres, o les den mucho amor, o cualquier alternativa), entonces ya están en el sistema educativo que no funciona y no ha funcionado…»
(Recomiendo leer la reseña entera en «Familia libre», y también los comentarios que los visitantes han puesto allí.)
Es cierto que en la última parte de la película se habla también de la importancia de la familia, de la responsabilidad y capacidad de los padres para educar a sus hijos, de que antiguamente todos los niños fueron educados dentro de sus familias, y de que la escuela debería (solamente) «acompañar» este proceso. Y entiendo que para muchas familias acostumbradas al sistema dominante y educadas dentro de este sistema, sería un paso demasiado grande asumir ellos mismos la educación entera de sus hijos – un paso que no se atreven a dar. Para ellas, si buscan una educación que realmente beneficie a los niños en vez de destruirlos, una escuela alternativa sería un buen camino (por supuesto una que respete a la institución de la familia).
Pero sí, habría que enfatizar más el hecho de que en realidad, cada padre y cada madre es por naturaleza (y por ordenación de Dios) un(a) experto(a) en la educación de sus propios hijos – y si todavía no lo es, con seguridad se convertirá en tal experto(a) con los años de experiencia, simplemente haciéndolo.
(No es que los productores de la película se hayan olvidado de estos temas. German Doin respondió en un comentario en «Familia libre»: «Sinceramente creímos que debíamos de incluir la idea de que existen experiencias de educación en casa y educación sin escuela, pero a la hora de profundizar nos vimos con corto tiempo y poco material. Creemos necesaria una película solamente dedicada a estos temas.» – Espero mucho que la realización de tal película se haga realidad.)
Como cristiano, yo hubiera deseado también que la película presente a alguna escuela o familia con trasfondo cristiano. Pero este no es el problema de los autores: ¡es el problema de los cristianos que todavía (según mi conocimiento) no han establecido ninguna escuela alternativa cristiana! – Me alegré de que por lo menos en la lista de las personas entrevistadas apareció el nombre de Kathleen McCurdy, fundadora de la «Organización Familia Escolar».
Algunas de las escuelas presentadas tienen un trasfondo ideológico-religioso bastante sospechoso desde un punto de vista cristiano (p.ej. las escuelas Waldorf, o las que se inspiran en religiones indígenas). Parece que esto ha dado una ocasión (o un pretexto) a algunos comentaristas para denigrar todos los movimientos de educación alternativa en general como un asunto de «sectas esotéricas». Pero las entrevistas en la película no resaltan estas particularidades. Más que todo enfatizan principios que la mayoría de los educadores alternativos tienen en común, y que coinciden también con la fe cristiana: el amor por los niños; el permitirles ser niños y desarrollarse y aprender según sus propias características de niños; el respeto ante la individualidad de cada niño; la libertad; el dar oportunidades para desarrollar sus talentos y para hacer decisiones; el tomar en serio las emociones y no solamente el intelecto; el valorar al niño por quien es y no por su «rendimiento»; etc. – todo esto es ciertamente mucho más cerca de un estilo de vida cristiano, que lo que se hace en las escuelas tradicionales. Lástima que exactamente aquellos que se llaman cristianos, todavía no empezaron a practicarlo.
Cada persona que alguna vez se ha preguntado si la «educación» no podría ser diferente de lo que se hace en las escuelas tradicionales, debería ver este documental.
La película se puede descargar y difundir libremente.
Sitio web de la película: http://www.educacionprohibida.com
En YouTube:
[youtube http://www.youtube.com/watch?v=-1Y9OqSJKCc?rel=0]